lunes, 12 de julio de 2010

DIAS DE INVIERNO

PINTURA: Nostalgia -   DE: María Soledad
Los árboles se desnudan,
se sacan sus ropajes verdes
para vestir la piel gris
en días de invierno.


No quiero cualquier amor,
quiero tu amor,
ese amor que me permite reír
en días de invierno.


Quiero el amor
compartido contigo,
entre alamedas bañadas
en días de invierno.
IRMA PAVEZ

GUITARRA

PINTURA: Guitarra - DE: Concha Ferrer
Alguien dijo que naciste
fruto, pájaro, sombra
Cantaron que naciste sudor
virutas, barnices –rejas tal vez-
Artesana siempre.
Y te quedaste voz, canto y esperanza
Tus bordonas toscas y suaves, como macho amante y tus niñas amables y tiernas cantan en mis manos y mil manos haciéndose un solo canto, una sola marcha y una bandera
En todas las voces, marchas y banderas.
Entregas más ternura que cualquier madre
Y más felicidad que otra hembra
Y más grito de libertad que cualquier discurso de líder sagrado y convenido o cualquier texto clandestino
Sin pedir nada a cambio
Todo has sido y serás
madera frutal de vientos
en mi copla, bailes y cantos
que son bailes, coplas y cantos tuyos
nacidos de la savia de la tierra arisca, antigua, eterna y vital.
Por ello tu alma tiene voz de lucha
de rebeldía,
de amor por mi hijo
que te tomará para durar todos los cantos
De los otros hijos de la tierra sabia, eterna y vital
JAIME FRANULIC

BARRIO

CARTEL OBRA DE: Francisco Javier Rodríguez Vega
Angostas son las franjas
entre las viejas casas bajas
amarillo el tenue farol solo
que ilumina apenas las charcas
Se torna cómplice
de miradas furtivas
entre la niña rizada
y el flaco ese del cité de la otra cuadra o entre la morena y el paco raso de gastados zapatones chuecos
Las toscas aceras relampaguean
al paso cimbreante
de las caderas jocundas
de esta niña que está tan grande, oiga
Las calles del barrio antiguo
esconde a gritos los dramas
y las ternuras obreras tras las cortinas ahoga colillas entre orines de borracho y se asoma puntual como sobras para palomas de la viuda vieja, sola y triste
Se perfuma de pan aromoso de las cuatro, delata arroces baratos y octavos de aceite en pizarras negras, acepta la truca de romanas entre papas y tomates mustios
Es la sonrisa triste de cada día
que cambia desdentada y franca
en felizañonuevo p’oh vecino oiga
trepado en un abrazo al cuello
equilibrados en zapatos blancos baratos
Se viste de tierna alegría
por pascua
con juguetes plásticos
y viejos con barbas de algodón
Cambia los ruidos de pichanga
por silente respeto
Acompañado de monedas
cuando es necesario llorar
tanta muerte acumulada de una vez,
que hace al barrio más triste
pero más hermano y solidario
Tu locura cotidiana me vio crecer
trepado a las ramas o empinándome para ver más allá del horizonte por entre las viejas casas alineadas
JAIME FRANULIC